Tortugas marinas en Blowing Rocks Preserve
The Nature Conservancy ha trabajado para proteger a estas criaturas en el sur de Florida desde principios de la década de 1980.
Sí, son adorables y muy pequeñas. Y avanzan inseguras por la playa en un peligroso recorrido hacia el mar para comenzar su vida en el océano. Desde principios de la década de 1980, el equipo de biólogos de The Nature Conservancy en Blowing Rocks Preserve (enlace en inglés) en Hobe Sound han esperado, con los nervios típicos de un padre primerizo, a los recién nacidos para guiarlos al agua sin inconvenientes. Las tortugas marinas tienen un recorrido difícil desde el inicio pero Conservancy está allí para ayudarlas. Este año, nos desempeñamos como socorristas de más de 25 crías que necesitaban ayuda antes de llegar al agua.
“Todas las mañanas, durante la temporada de anidación, nuestro equipo patrulla la playa buscando tortugas que necesiten ayuda. Una pequeña ayuda puede hacer la diferencia”, dijo Sarah Martin, coordinadora de The Nature Conservancy para la conservación de la tierra en el sur de Florida y directora del programa de rescate de tortugas marinas (Sea Turtle Rescue Program).
La temporada de anidación de las tortugas en el sur de Florida se extiende desde principios de marzo hasta fines de octubre. Las tortugas pequeñas enfrentan muchos desafíos, incluso en el nido antes de romper el cascarón. Las tormentas y los huracanes pueden enterrar los nidos en la arena destruyéndolos o barriéndolos hacia el mar. Cuando las crías logran salir de sus nidos y encaminarse hacia las olas, se exponen al calor y a los depredadores y deben luchar contra las adversidades como la deshidratación y los pájaros, cangrejos, serpientes y mapaches. En Blowing Rocks Preserve, el cordón natural de rocas que se extiende a lo largo la playa crea una cortina de agua con el rompimiento de las olas en la marea alta. Las rocas tienen muchas grietas y las crías suelen quedar varadas en ellas cuando comienzan su recorrido desde el nido hacia el mar.
“La piedra caliza de Anastasia, que tanto contribuye a la belleza de nuestras playas, puede ser un desafío para las tortugas”, admitió Cristin Krasco, administrador de Blowing Rocks Preserve. “Es por esto que nuestro programa de rescate de tortugas marinas es fundamental. Les brindamos un camino seguro a las tortugas que anidan y a las crías que quedan varadas en las rocas”.
Cada año, una de cada cinco tortugas hembras adultas en reproducción y cinco de cada 30 crías son rescatadas en Blowing Rocks.
Las tortugas marinas que anidan en la reserva figuran en la lista federal de animales en peligro de extinción. De hecho, todas las especies de tortugas de Florida figuran en esta lista. Las tortugas marinas laúd, boba (caguama), carey, lora y verde usan las playas y las aguas de la costa de Florida. Los nidos de tortugas marinas boba son definitivamente los que más abundan cada año en la reserva, promediando los cientos, seguidas de las tortugas marinas verde y laúd.
“La costa atlántica de Florida es el principal lugar donde anidan las tortugas marinas boba”, dijo Martin. “Con tantos nidos de tortugas marinas boba en Blowing Rocks, creemos que es un lugar sumamente importante para ellas.”
En ciertas épocas, la piedra caliza de la playa se cubre completamente de arena, lo que les permite a las tortugas en reproducción abrirse camino hacia la playa desde el océano antes del amanecer para poner sus huevos. La playa es un sistema dinámico y, a medida que transcurre el verano, las mareas oceánicas pueden arrastrar arena hacia el mar, dejando expuesto el afloramiento rocoso. Esta situación dificulta el recorrido para las crías. Muchas quedaron varadas en las grietas profundas de la piedra caliza.
“Nuestro equipo estuvo vigilando para detectar tortugas varadas y otras especies marinas en proliferación todos los días”, dijo Martin. “Cuando detectamos crías sanas varadas en la playa, las regresamos al océano”.
Las tortugas marinas juegan un rol importante en el ecosistema marino ya que influyen en la diversidad y el hábitat de su medioambiente y ayudan a mantener el equilibrio. Se alimentan de una variedad de fuentes como hierbas y algas marinas, aguas vivas y crustáceos. Migran enormes distancias para aparearse y anidar. Durante su vida, las tortugas marinas enfrentan peligros ocasionados por el hombre como la contaminación de las aguas con basura y desechos de la navegación y la pesca. El éxito de su anidación se ve afectado por la urbanización y la invasión del hábitat, la iluminación de la playa, la caza furtiva o la recolección de los huevos. Los métodos para proteger las playas y las áreas urbanizadas, como la recuperación de la playa y la reactivación costera con escolleras y diques marinos por parte del hombre, resultan obstáculos para estos animales.
Las tortugas marinas se enfrentan también a los tiburones y a la depredación de sus nidos. Además, el cambio climático ejerce su impacto: temperaturas oceánicas cálidas, aumento del nivel del mar y las fuertes tormentas cada vez más frecuentes alteran los hábitats naturales. Se estima que solo una de cada 1000 a 10 000 tortugas marinas sobrevive en la edad adulta y, según las especies, podrían pasar de 15 a 50 años para alcanzar su madurez sexual. Las tortugas marinas hembras pueden reproducirse cada dos a cuatro años y suelen regresar a la misma playa donde nacieron, lo que hace que resulte aún más importante la protección de las áreas de anidación.
En ciertas ocasiones, algunas tortugas no llegan al mar: son tortugas jóvenes débiles que terminaron regresando a la playa en mal estado de salud. Una vez detectadas, reciben atención inmediata en el Loggerheard Marinelife Center (enlace en inglés) más cercano tras ser rescatadas de la costa. A veces, se encuentran tortugas marinas con peligrosos plásticos en su tracto digestivo. Este tipo de contaminación es una grave amenaza a la vida marina.
Con el paso de los años, el programa ha ayudado con éxito en el rescate y la liberación de cientos de tortugas. Las tortugas hembras que anidan suelen quedar atrapadas en las rocas. Cuando esto suceda, un equipo de The Nature Conservancy y de la Comisión de Conservación de Vida Silvestre y Pesca de Florida (Florida Fish and Wildlife Conservation Commission) trabaja para liberarlas y regresarlas sanas y salvas al océano.
The Conservancy hace todo lo posible por garantizar áreas seguras de anidación y un futuro seguro para las tortugas marinas, desde nuestros esfuerzos por proteger y restaurar el hábitat costero y las aguas hasta nuestro programa de rescate de tortugas marinas (Sea Turtle Rescue Program) en Blowing Rocks Preserve. Si encuentra una tortuga marina en peligro, llame a FWC para informar la ubicación y obtener instrucciones.
Para informar que una persona está dañando un nido de tortuga marina o si encuentra una tortuga marina herida, muerta o en peligro, llame al: 888-404-FWCC (3922).
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