Trabajo de conservación en el humedal de Batuco

¿Por qué proteger el humedal de Batuco?

Ubicada en el norponiente de la comuna de Lampa, la Laguna de Batuco forma parte de una red de humedales que conectan humedales costeros con los valles transversales del centro del país y hacia otras regiones. Debido a su alta concentración de biodiversidad, el humedal es considerado como sitio prioritario para la conservación de la biodiversidad, pues abarca más de 11.000 hectáreas.

Una de sus principales características es la alta concentración de fauna de aves acuáticas residentes y migratorias. Los registros indican una riqueza cercana a 125 especies de aves, y registros en línea señalan hasta 144.

La declaración como Santuario de la Naturaleza del humedal de Batuco contribuye tanto al cuidado de la naturaleza como a la regulación del desarrollo inmobiliario en los alrededores de la Laguna: actualmente en el sector de Batuco hay muchas actividades industriales que, a partir de ahora, deberán procurar no generar impactos negativos en su desarrollo.

Conservación del humedal

Pese a toda la normativa legal que lo regula, el humedal de Batuco se ha visto fuertemente degradado a lo largo del tiempo, alterando su estructura, función y composición y, a su vez, desencadenando pérdida de biodiversidad y servicios ecosistémicos.

En este sentido, The Nature Conservancy (TNC) ha colaborado con diversas organizaciones para la conservación del territorio, tomando como punto de partida la realización del Plan de conservación humedal de Batuco 2018 – 2023, un trabajo liderado por TNC y Fundación San Carlos de Maipo, que se realizó gracias al compromiso de más de 35 instituciones.

Este plan desempeña un rol vital, ya que ha permitido la generación de compromisos que se han ido cumpliendo en el tiempo, como la declaratoria de Santuario de la Naturaleza de la laguna, las actividades de monitoreo de fauna y el programa de educación ambiental, desarrollado en colaboración con Fundación Ibáñez Atkinson, que se han realizado conforme a lo establecido en esta iniciativa de conservación. Esto demuestra la importancia de un trabajo estratégico y colaborativo para la protección de estos ecosistemas.

También cabe destacar que el trabajo de conservación no solo contribuye al resguardo de la naturaleza, sino que va en beneficio directo de la comunidad; la declaración de la Laguna de Batuco como Santuario genera espacios para recreación en un lugar donde realmente hay muy pocas de estas áreas. Además, por su riqueza biológica, esta zona posee un enorme potencial de desarrollo turístico. 

Cómo enfrentar amenazas a la conservación: Manual de Buenas Prácticas Medioambientales para vecinos de humedales

TNC busca conservar el sistema completo de humedales de Batuco, que comprende cerca de 11.000 hectáreas. Esto abarca las conexiones que tienen los humedales, como el humedal Puente Negro, el de Santa Inés, el estero de Lampa y los humedales de Quilicura de O’Higgins y San Luis. Muchos de estos humedales son temporales, solo emergiendo los espejos de agua en invierno.

La expansión urbana está llevando a que los suelos históricamente utilizados por la agricultura estén siendo reemplazados por condominios, los que -sin la planificación adecuada- no mantienen estas zonas húmedas. A lo anterior se suman los casos de loteos ilegales, que ponen en riesgo tanto a la naturaleza como a las comunidades de la zona.

Es por esto que el “Manual de Buenas Prácticas Medioambientales para vecinos de humedales”, elaborado por TNC en colaboración con expertos, académicos, instituciones del estado y otras ONGs, busca ilustrar la importancia de estos ecosistemas, además de entregar a quienes habitan cerca de ellos diversas herramientas que les permitirán colaborar en su conservación. Las recomendaciones se clasifican según sean para el cuidado del agua, del suelo, de la biodiversidad y del patrimonio cultural, y el manual incluye anexos con recetas caseras para limpiadores biodegradables e incluso para compostaje. El manual se puede descargar al final de esta nota.