Ante un futuro incierto y recursos limitados, ¿dónde deberían invertir los gobiernos para garantizar el bienestar de sus ciudadanos? ¿Desarrollo de empleos para economías rurales en dificultades? ¿Mejor infraestructura para reforzar la seguridad hídrica? ¿Preparar a las comunidades para adaptarse a un clima cambiante?
Todos estos desafíos económicos, políticos y ambientales son temas urgentes, y están profundamente interconectados. El deterioro de los recursos naturales, como el agua dulce y el suelo fértil, y el cambio climático afectan la salud, la riqueza, la desigualdad y la migración, y amenaza la estabilidad social y política.
La conexión entre estos desafíos también señala un camino a seguir. Detener la deforestación y plantar árboles a escala es una de las medidas más eficaces y científicamente probadas que los gobiernos pueden adoptar en este momento para hacer frente a múltiples desafíos.
El trabajo que TNC ha estado apoyando en las montañas de Mantiqueira en Brasil ofrece un excelente ejemplo. Las ondulantes y verdes colinas de la Sierra de Mantiqueira se elevan sobre el litoral oriental de Brasil, y se extienden sobre partes de los estados más poblados y económicamente importantes del país: São Paulo, Rio de Janeiro y Minas Gerais. La región de Mantiqueira forma parte del Bosque Atlántico, una de las regiones de mayor diversidad biológica y más vulnerables del planeta. En la lengua indígena original tupí, Mantiqueira significa “montañas llorosas”. El nombre hace referencia a los abundantes ríos y manantiales que albergan y que a nuestros antepasados indígenas, les sugerían la imagen de las lágrimas. Actualmente, estos ríos forman parte de los sistemas que suministran agua y energía a millones de personas en los mayores centros metropolitanos de Brasil.
Quote: Paulo Henrique Pereira
A pesar de sus riquezas ecológicas, la historia de la región de Mantiqueira es un relato clásico de destrucción generalizada del medio ambiente en nombre del progreso económico. Casi el 80% de la cobertura del suelo se ha perdido a causa de cientos de años de deforestación, impulsada principalmente por la agricultura, la ganadería y el desarrollo urbano insostenibles.
Sin embargo, el futuro de esta región podría liderar el camino para el emergente movimiento mundial de restauración. En este caso, TNC está trabajando con sus socios para incentivar alternativas de producción sostenible como la agroforestería, y para poner en marcha una nueva “economía de restauración” que puede transformar el uso de la tierra al vincular a productores que aplican prácticas sostenibles con mercados viables, aliviando así la necesidad de talar bosques.
Nuestra labor en Mantiqueira reúne a los interesados de 284 municipios brasileños para construir una red de restauración forestal que aborde la seguridad hídrica, el desarrollo sostenible y el cambio climático. Esta red resultará en 1,2 millones de hectáreas de bosque que ayudarán a Brasil a cumplir con el 10% de su compromiso nacional de restauración forestal en el marco del Acuerdo de París sobre el clima, con el potencial de secuestrar 260 millones de toneladas de dióxido de carbono de la atmósfera en 30 años, equivalente a las emisiones de más de 55 millones de automóviles. Nuestras alianzas también ayudarán a asegurar el agua para los habitantes de las ciudades, transformarán las economías rurales y ayudarán a proteger las especies en peligro de extinción.
Una fuerza para la naturaleza
Este informe demuestra cómo The Nature Conservancy está respondiendo a este desafío no solo en el ámbito del cambio climático, sino en tierras, ríos, océanos, agricultura y ciudades.